Muchos atribuyen el inicio del mercado alcista de las criptomonedas a la aparición de nuevos conceptos—ya sea RWA, X402 u otros temas candentes—que se consideran la llave maestra. Pero en realidad, esta comprensión está al revés.

Estas narrativas son más como disparadores del mercado, en lugar de verdaderos combustibles. Sin duda, llaman la atención, pero no proporcionan el impulso necesario para que el mercado suba. Al final, lo que lo decide todo, en definitiva, es el dinero. Cuando la liquidez llega, incluso las lógicas más débiles pueden convertirse en consenso; cuando la liquidez se agota, incluso los argumentos más sólidos no aguantan.

Si realmente quieres entender esta ronda de mercado, primero debes salir del círculo de las criptomonedas. Enfoca la vista en el panorama general de los activos globales. La clasificación de acciones, bonos y commodities puede servir, pero no es suficiente. Lo clave es entender qué papel desempeñan diferentes activos en las distintas fases del ciclo económico y del ciclo de liquidez.

Lo importante no es qué etiqueta lleva un activo, sino con qué vive y qué puede dañarlo fácilmente. Algunos activos se benefician de la caída de los tipos de interés reales, otros dependen de las fluctuaciones en las expectativas de inflación, y algunos simplemente se desploman ante una crisis de pánico en el mercado. Estas diferencias son la verdadera clave para entender el flujo de capital. Esta serie partirá de ese marco, colocando las criptomonedas en un contexto macroeconómico adecuado para su análisis.