¿Los gestores de activos por valor de miles de millones también se están pasando a vender cursos?

Recientemente vi a una conocida ejecutiva femenina de un fondo de inversión privado que de repente lanzó un curso de pago por conocimiento, lo cual fue un poco inesperado. Una figura que maneja fondos de miles de millones ahora empieza a vender conocimientos de inversión—esta diferencia no pasa desapercibida.

El modelo del curso es muy convencional: marca personal + fotos retocadas + textos para crear expectativa. Combinado con campañas de marketing como "recién lanzado ayer, en 2 días ha generado más de 5 millones" y datos similares, se crea una mentalidad de "los expertos también hacen esto".

La verdad es que esto refleja un fenómeno actual en el mundo de las inversiones: los gestores de las principales instituciones empiezan a darse cuenta de que, aunque el tamaño de gestión tiene un techo, el espacio para el pago por conocimiento es ilimitado. Un curso con un precio que va desde unos pocos miles hasta varias decenas de miles, con costos muy bajos, rápida conversión, difícil de que vuelvan a comprar, pero con gran potencial de discusión.

Pasar de la gestión de activos a la monetización de contenido parece ser una nueva tendencia, pero en realidad es un producto de la competencia creciente en toda la industria de gestión de patrimonio. Después de todo, contar historias solo con los rendimientos de inversión ya no es tan efectivo; vender directamente metodologías es mucho más rápido.