En este mercado, aproximadamente se pueden distinguir dos tipos de jugadores completamente diferentes.

**Primero: las personas que consideran los activos digitales como otro tipo de activos financieros**

La forma de jugar de este grupo es bastante simple: en realidad no creen que estén especulando con criptomonedas. Cuando reciben su salario, una parte la invierten, mes tras mes, año tras año, sin mirar nunca las tendencias del mercado, incluso si tienen la app instalada, no la abren. $BTC, $ETH están allí, como minas de oro. No saben si el mercado alcista multiplicará sus ganancias, ni si en el mercado bajista se reducirá a la mitad; además, en sus redes sociales no verás ninguna palabra sobre criptomonedas.

¿En qué es más duro este tipo de personas? En que han reconocido un hecho: no pueden predecir las fluctuaciones a corto plazo. Como no pueden acertar, simplemente dejan de intentar adivinar, e incluso convierten el "no saber" en su principal ventaja competitiva. Invierten de manera fija entre 30,000 y 50,000 cada año, durante diez años, y sus activos fácilmente superan los 10 millones. Un ciclo completo de mercado alcista y bajista dura cuatro años, con dos ciclos es suficiente.

Esta es la ruta que las personas comunes pueden copiar realmente y que además es la más legítima. Pero el problema es que el 99% no puede hacerlo, porque no pueden simplemente "no hacer nada".

**Segundo: las personas que sobreviven gracias a la suerte y al ritmo**

Ellos navegan todos los días en diferentes comunidades y en Twitter, hoy escuchan a alguien hablar de MEME, mañana siguen la tendencia de las monedas AI, y pasado mañana entran en alguna nueva blockchain. Es normal que en diez operaciones pierdan ocho, y las dos que ganan apenas alcanzan para cubrir las pérdidas. Pero siempre que llegue un verdadero mercado alcista, habrá una o dos veces en las que, por pura suerte, compran alguna moneda que multiplica por cien, y de unos pocos miles de yuanes pasan a tener decenas o incluso cientos de miles de yuanes.

En el mundo de las criptomonedas, todos han visto a este tipo de personas. La diferencia está en un solo pensamiento: quienes pueden convertir sus criptomonedas en casas, autos o ahorros a tiempo, son los verdaderos ganadores; quienes no pueden mantener sus posiciones y siguen apostando todo, al final, terminan devolviendo su dinero al mercado.

En definitiva, estas personas vienen al mercado a repartir el pastel, y cuánto puedan llevarse depende completamente de cómo esté de humor el cielo hoy.