Desde octubre del año pasado, una empresa norteamericana de hipotecas que cotiza en la Bolsa de Nueva York, Pineapple Financial, hizo algo bastante atrevido: invirtió directamente 100 millones de dólares para crear un tesoro de INJ, comprando más de 4 millones de INJ en varias tandas y apostándolo todo en staking. Pero esto no es solo una simple operación financiera empresarial, la señal que hay detrás es aún más interesante: las finanzas tradicionales están acelerando su migración hacia la blockchain.

El equipo de Pineapple está acumulando INJ como si fuera "oro digital", pero sus ambiciones van mucho más allá. La empresa planea utilizar la herramienta iAssets de Injective para trasladar su negocio de hipotecas a la blockchain, emitiendo tokens respaldados por bienes inmuebles y canalizando directamente el flujo de caja offline hacia los pools de DeFi. Según su informe financiero, se espera que este tesoro genere una rentabilidad anual superior al 15%, una cifra mucho más atractiva que la de los bonos del Estado, y de paso pueden presumir ante los accionistas de activos en blockchain.

Lo más impactante es que, casi al mismo tiempo, varias instituciones como Rex Shares, Osprey Funds y 21Shares presentaron solicitudes a la SEC para lanzar un ETF de INJ en versión staking. El diseño del producto es bastante ingenioso, ya que ofrece exposición al activo al contado y además permite captar los rendimientos del staking, con previsión de salir al mercado durante el primer trimestre del próximo año. Esto significa que los inversores regulados de EE. UU. podrán tener INJ de forma indirecta a través de sus cuentas 401k o cuentas de broker, sin necesidad de gestionar una wallet propia, igual que ocurre con los ETF de Bitcoin. Pero tratándose de un token tan ligado a las finanzas como INJ, el potencial de rentabilidad podría ser aún mayor.

Según los documentos presentados, la custodia de los activos subyacentes será gestionada conjuntamente por Anchorage y Fireblocks, y la parte del staking la llevará a cabo directamente NTT Digital. Si esta combinación de marco regulatorio tradicional y rendimientos on-chain funciona, la narrativa de INJ se consolidará por completo.