El límite de crédito de las tarjetas de los estadounidenses está experimentando una expansión frenética.

Los últimos datos de la Reserva Federal de Nueva York muestran que, en el tercer trimestre de 2025, el límite total de crédito de las tarjetas en Estados Unidos se disparó hasta los 5,3 billones de dólares, la cifra más alta de la historia. En el mismo periodo, las facturas pendientes de pago también aumentaron hasta 1,2 billones, 67.000 millones más que el año pasado.

Haciendo cuentas, los estadounidenses aún tienen 4,1 billones de "crédito disponible" sin utilizar. Más sorprendente aún es que, desde 2020 hasta ahora, los bancos han incrementado el límite de crédito para los consumidores en 1,5 billones, mientras que la deuda real solo ha crecido en 430.000 millones, una diferencia de más de tres veces.

La lógica detrás de esto es sencilla: los bancos compiten por aumentar el límite de crédito, ofrecer devoluciones en efectivo y recompensas en puntos, todo para que gastes más con tarjeta.

Pero este juego, a estas alturas, ya muestra señales evidentes de una crisis de deuda. Cuando el límite de crédito crece mucho más rápido que el consumo real, es solo cuestión de tiempo que la burbuja estalle.