Con esta operación de spot, la cuenta se ha esfumado lo equivalente al precio de un coche. Ver la posición en rojo da auténtico vértigo, realmente se cumple ese dicho de que la volatilidad del mercado no tiene piedad. Al principio quería comprar en el suelo para aprovechar el rebote, pero cuanto más caía, más profundo era el pozo, y ahora incluso vender con pérdidas parece que llega demasiado tarde. ¿Qué tal lleváis vuestras posiciones en spot últimamente, compañeros? ¿Hay algún hermano de desgracia que también esté pillado?