El desplome de Bitcoin ha sido bastante fuerte. Desde el máximo de octubre, ha caído más del 32%, rompiendo los 87,000 dólares y llegando a caer por debajo de los 85,300 dólares en un momento, alcanzando un mínimo desde abril.

La velocidad de esta caída ha sido sorprendente. Datos muestran que en 24 horas, más de 245,000 posiciones fueron liquidada en toda la red, evaporando directamente 5.8 mil millones de dólares. El miedo se extiende por el mercado y muchas personas todavía están esperando a que se confirme dónde está el fondo.

**Desde los datos, esta caída en realidad tiene un patrón que se puede seguir**

Durante el horario de negociación del jueves, las criptomonedas continuaron con una tendencia bajista que duró más de un mes. Lo interesante es que esto contrasta claramente con la breve euforia provocada por los informes financieros de Nvidia en el mercado estadounidense, ya que la compra en el mercado claramente no es suficiente y la motivación para sostener el rally de principios de año está desapareciendo poco a poco.

La raíz de esta corrección, en realidad, es la liquidación continua tras la subida significativa de octubre. El dinero rápido sale muy rápido, hay muchos que compraron en los niveles altos, y el mercado se vuelve especialmente vulnerable ante la presión de venta.

James Butterfill, director de investigación de CoinShares, lo expresó claramente: "Las criptomonedas están experimentando una venta por parte de grandes inversores impulsada por la 'teoría del ciclo de cuatro años', que suele ir acompañada de caídas cíclicas." Aunque él mismo no comparte totalmente esta teoría, el mercado claramente está actuando según ese guion.

La pregunta ahora es, ¿cuánto más durará esta corrección? ¿Podrán mantenerse los niveles de soporte? ¿Podrá estabilizarse el ánimo del mercado? Todo esto requiere tiempo para ser confirmado.