Tras la ola de capital institucional impulsada por los ETF al contado de Bitcoin y Ethereum, ahora XRP está dando su propio salto hacia la adopción generalizada. En noviembre de 2025, cinco gigantes de la gestión de activos—Franklin Templeton, Bitwise, Canary Capital, 21Shares y CoinShares—vieron cómo sus ETF al contado de XRP entraban en el sistema de la U.S. Depository Trust & Clearing Corporation (DTCC). Aunque pueda parecer un detalle técnico, en realidad indica que los ETF de XRP han alcanzado la última etapa antes de su salida a bolsa.
Para el mercado, no es un acontecimiento aislado, sino una señal de transformación estructural: los criptoactivos avanzan con paso firme hacia el núcleo del sistema financiero mundial.

(Fuente: cryptobriefing)
En el proceso de lanzamiento de un ETF, el registro en la DTCC suele indicar que el producto está listo para acceder al sistema de compensación y liquidación. Este es un hito técnico clave previo al comienzo de cotización. Aunque este paso no supone la aprobación de la SEC, figurar en la lista de la DTCC significa que la estructura del ETF, el código ISIN y el mecanismo de liquidación del fondo han superado el examen correspondiente. El emisor mantiene una interacción activa con los reguladores. Los códigos de estos cinco productos son:
Para los profesionales de las finanzas tradicionales, esto supone el último paso para convertir la documentación en un ETF operativo. En el mercado de criptoactivos, representa un avance: es la primera vez que varios gestores de activos líderes impulsan conjuntamente la creación de un ETF al contado de XRP.
En esta carrera por los ETF, Canary Capital destaca por su “mecanismo de enmienda acelerada”, que permite que las solicitudes entren en vigor automáticamente en 20 días si la SEC no presenta objeciones. Este proceso de entrada en vigor automática es sumamente inusual en las solicitudes tradicionales de ETF, y Canary podría ser el primer emisor en listar un ETF al contado de XRP.
Este procedimiento acorta considerablemente el plazo desde la solicitud hasta el lanzamiento y crea un precedente para una mayor agilidad regulatoria en futuros lanzamientos de ETF cripto. Para el resto de emisores, implica un cambio en el ritmo de relación con los reguladores: pasar de esperar la aprobación a la efectividad automática por defecto.
Este año, Brasil se convirtió en el primer país en aprobar un ETF al contado de XRP, lo que pone de relieve no solo las diferencias de velocidad regulatoria, sino también un cambio de fondo: la regulación de criptoactivos está pasando de Wall Street a un mercado global multicéntrico. A medida que XRP regresa al top 3 mundial por capitalización de mercado y se perfila como posible intermediario para pagos transfronterizos y procesos de liquidación financiera, crece el interés institucional por asignar XRP. Analistas de JPMorgan señalan que, si se aprueba, un ETF de XRP podría atraer miles de millones de dólares en flujos de entrada, estableciendo una nueva estrategia de asignación de activos junto a Bitcoin, Ethereum y XRP.
La U.S. Securities and Exchange Commission (SEC) sigue siendo la autoridad decisoria final en este proceso. La mayoría de los analistas consideran que los recientes retrasos en la revisión de las solicitudes de Bitwise y CoinShares son de carácter procedimental, no indicadores de rechazo, lo que sugiere que los reguladores están valorando las garantías para los inversores, los modelos de liquidez y los mecanismos de rescate, elementos sujetos a revisión regulatoria.
Con varios ETF llegando a la última etapa al mismo tiempo, la SEC afronta una presión colectiva del mercado. Dado que los ETF de Bitcoin y Ethereum ya han establecido precedentes de cumplimiento, resulta cada vez más difícil justificar el rechazo a XRP. Esto alimenta el optimismo del mercado: los inversores perciben tanto un nuevo producto como un giro en la actitud regulatoria.
El ETF de XRP es mucho más que un producto financiero: representa un hito simbólico que marca la evolución de los activos blockchain, desde tokens negociados en mercados hasta vehículos de inversión gestionados, y muestra la convergencia entre las finanzas tradicionales y la tecnología cripto. Para las instituciones, supone participar en activos cripto de forma regulada; para el mercado, significa el inicio de un nuevo ciclo, en el que el valor de los criptoactivos supera la especulación y entra en los grandes fondos de capital a través de ETF en estrategias a largo plazo.
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En la continua tensión entre regulación e innovación, el ETF de XRP es un ejemplo paradigmático. No se trata solo del avance de una solicitud, sino de una instantánea de la evolución de las actitudes financieras hacia los criptoactivos. Independientemente de la decisión final de la SEC, la llegada del ETF de XRP confirma una tendencia irreversible: los activos blockchain están saliendo de la marginalidad y entrando en el núcleo institucional.





